16/10/11

TRONCO DE SALVACION

Son tantos años de mentir que ahora ya no se donde está la verdad, y si lo se soy capaz de continuar mintiendo, a vosotros, a ellos y, lo que es peor, a mi. Tengo ganas de que esto acabe y me gustaría volver atrás y empezar de nuevo. ¡Qué original soy! Pero no me queda tiempo, mucho tiempo para conseguirlo, y ante el temor de quedarme a mitad del camino, expuesto a todos los francotiradores, optaré por seguir mintiendo. ¿Por qué? No lo se. Es como cuando caes a un río de fuerte corriente y sientes que te lleva y sientes que es inútil luchar en contra, que no hay un tronco al que agarrarte para que te lleve hasta el final del cauce, a la desembocadura de un mar en calma. Todos los troncos se han quemado. Y no sabes si al final existe ese mar ansiado. Esa calma azul transparente que se tiñe de rojo al atardecer.